El Salvador: Despilfarro, corrupción y lujuria

Por Ernesto Rivas Gallont*

¡Se destapó la olla y rebalsó la ignominia! Las revelaciones hechas por el Presidente Funes el viernes pasado, tienen hablando a todo el mundo. Por ahora, la atención se ha centralizado en el CNR el que, aparentemente, servía de fuente de financiamiento de gastos oscuros. Todos los periódicos hablan de lo mismo y dan, más o menos la misma información.

En el Centro Nacional de Registro había 29 plazas fantasmas y compensaciones excesivas a funcionarios miembros del partido ARENA, que ascendían a más de $700 mil al año. La investigación reveló que habían personas que recibían $3 mil mensuales y que solo aparecían el día de pago.

Funes se refirió a “una hermana de un alto ex funcionario del gobierno en el pasado”, pero que hasta el 31 de mayo cobró un salario de $2,229 mensuales”, expresó Funes. Se trata de una hermana del ex presidente de la República, Armando Calderón Sol quien actualmente es concejal de la alcaldía de San Salvador gobernada por ARENA.

Según Funes, una cuñada de un diputado de ARENA tiene un salario de $3 mil 200 mensuales. El diputado de ARENA Enrique Valdés prestó servicio de ginecología al CNR, con un salario de $954 al mes.

Ivo Príamo Alvarenga, columnista de LPG, fue “asesor externo” del CNR, cuando Félix Garrid Safie dirigía esta institución antes de ser Fiscal General de la República.


Siempre en el CNR, el hermano de un dirigente de fútbol tenía un salario de $1 mil 200 mensuales y era asesor en comunicación.

En el Ministerio de Medio Ambiente se identificó que un columnista de un periódico tenía un contrato de “asesor de comunicaciones” con un salario de $2 mil 57 mensuales. Según Funes, nunca fungió el cargo.

Marvin Galeas, columnista de EDH, trabajó como “asesor personal” para los ex ministros Hugo Barrera y Carlos Guerrero por un salario de más de dos mil dólares mensuales. Sin embargo, Funes aseguró que, Galeas formó parte de la campaña presidencial de ARENA.

El CNR se utilizó como fachada para la estructura de la campaña política de ARENA y de allí salían millares de mensajes denigrando al candidato Funes y a su partido, cuyo responsable fue Wilber Calderón, gerente de comunicaciones del CNR.

En las postrimerías de mayo se aumentaron los salarios a los empleados del Banco Multisectorial de Inversiones (BMI). Los empleados también fueron indemnizados por su tiempo de trabajar en el organismo y después fueron re contratados.


Según Colatino , la fiesta navideña del año pasado de la Secretaría Nacional de la Familia, costó medio millón de dólares, aun después que el Presidente Saca anunciara su plan de austeridad.

Sobre eso de los festejos, Funes dijo que nada de fiestas de fin de año, celebración por el día de la secretaria, del contador o de la enfermera; y no más bonos ni vales de consumo o para combustible.

Cuenta también que el director del ISSS tenía a su disposición ocho vehículos, que utilizaba indiscriminadamente.

“Hay instituciones donde las irregularidades espantan, realmente espantan, y obligan a una investigación expedita, consensuada, más sistemática que nos permita deducir responsabilidades administrativas y penales en el caso haya que establecer este tipo de responsabilidades”, dijo Funes, en la conferencia de prensa.

Lo que apenas ha asomado la punta es lo del gasto en publicidad presidencial. Según Funes, Saca gastó más de $20 millones en publicidad, durante su gestión. Suma que a primera vista parece grande pero en realidad es modesta, porque estamos hablando de $4 millones al año y si recordamos las campañas de promoción de la figura del presidente y de sus obras, estoy seguro que la suma sería considerablemente mayor.

Según Funes hay anomalías en muchas otras oficinas del gobierno y citó específicamente a los ministerios de Obras Públicas, Justicia y Seguridad y Gobernación, donde, según el ministro Centeno, se encontraron micrófonos en su despacho. Pero en ese ministerio hay mucho más escondido que micrófonos.

Funes anunció su intención de centralizar la adquisición de artículos de oficina, incluyendo agua envasada y la contratación de servicios de limpieza y seguridad.

Hace años existió en el gobierno una oficina encargada de compras, que se llamó la Proveeduría General de la República, cuya dirección era el puesto más apetecido del gobierno, porque quien llegaba a ocuparlo salía rico a fuerza de mordidas. Así es que ¡mucho ojo, señor presidente!

El presidente siguió hablando de muchas otras irregularidades y se comprometió a corregirlas, como vigilar el uso y abuso de los vehículos del gobierno, que son fuente de gastos excesivos en su adquisición y mantenimiento.

Para investigar las anomalías detectadas y otras, seguramente por detectar, Funes dijo que va a creara una comisión presidencial, que coordinará el ministro de Hacienda, integrada por peritos que se encargará de la investigación de las irregularidades.

Según el ministro de Hacienda, en los próximos seis meses se puede ahorrar alrededor de $35 millones en materia de recursos humanos y alrededor de 40 millones en bienes y servicios.

Finalmente, ¿qué tal esos $17 millones en medicinas vencidas encontradas en las bodegas del ISSS en San Salvador, Santa Ana y San Miguel?
Las medidas anunciadas por el Presidente Funes se refieren, naturalmente, al Órgano Ejecutivo. Habrá que ver qué hacen los Órganos Legislativo y Judicial para implementar también ellos un programa de austeridad similar. Es un hecho conocido por todos, que el la asamblea legislativa de derrocha el dinero en grandes cantidades, para pagar contratos de “asesores” amigos de los diputados, viajes y conexos, gasolina vehículos seguridad, alimentos y agua para los diputados y el personal, etc. El Judicial no se queda atrás.

Fuente: El Blog de Neto Rivas 15/06/2009

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