¿Meritocracia o compromisos políticos?

Por Juan A. Valiente*

El Presidente Mauricio Funes ha iniciado su gestión con amplia aprobación de todos los sectores y, sin embargo, comienza a arriesgarla innecesariamente. En muchas ocasiones el Presidente Funes ha dicho defender la verdad y ha usado la memoria de nuestro arzobispo mártir Oscar Arnulfo Romero para darle contexto.
Hay muchas cuestiones sobre las que conviene escribir ahora que el Presidente Funes ha tomado posesión. Ahora quiero compartir con Uds. algunas reflexiones sobre el proceso de selección del equipo de gobierno y los resultados que hemos obtenido como país.

Leyendo recientemente un artículo en Newsweek del alcalde Bloomberg, de Nueva York, sobre la gestión inicial del Presidente Obama, hacía la reflexión que más importante que lo que pudiera lograr en 100 días o las medidas iniciales de un gobierno es la conformación del equipo de gobierno. "En el gobierno o en los negocios, la cosa más importante que un nuevo jefe Ejecutivo puede hacer en los primeros meses es contratar a los líderes más talentosos e innovadores, y establecer altas expectativas para ellos".

Ese ha sido uno de los retos del Presidente Funes. "Este será el gobierno de la meritocracia, no el gobierno de privilegios de familias, de abuso de clientelas y de los vicios de padrinazgos sombríos. Derechos, sí, para todos. Privilegios, no, para nadie. Aquí las personas serán reconocidas por su talento y su honestidad y no por sus conectes o su apellido. Se acabó el tiempo del padrinazgo", dijo el Presidente Funes.

Al parecer el Presidente Funes entendió el reto, al menos para fines de elaboración de discursos. Sin embargo, el proceso de conformación de su gabinete de gobierno no parece haber decantado en la selección de los más talentosos y de los más innovadores. Ya no parecen importar los apellidos, pero sí el carné de membresía del FMLN o los favores recibidos durante la campaña electoral.

Si bien es cierto que hay muchas personas en el gabinete que son bastiones indudables de la meritocracia, no siempre están al frente de las instituciones involucradas y no siempre donde deberían. Nos referimos entonces a los otros, a la presencia de personas evidentemente sin la capacidad esperada y sin la experiencia que lo justifique. Los que eligieron al Presidente el pasado 15 de marzo esperaban que el discurso de la meritocracia y de la verdad se hicieran realidad. El mismo Presidente ha dicho que será juzgado por los hechos.

Haría bien el Presidente Funes en reconocer la realidad de las negociaciones habidas, haría bien el Presidente Funes en decir la verdad sobre los "padrinazgos sombríos", haría bien el Presidente Funes en compartir con mayor diafanidad la realidad de la política en el país. No es que esperáramos pureza en procesos políticos complejos, no es que no reconociéramos que "no se trata de soplar y hacer botellas", pero por favor tampoco nos quiera dar atol con el dedo.

El Presidente Funes admira al Presidente de los Estados Unidos, Barack Obama. Una de las características que ha distinguido a dicho Presidente es su decisión de evitar las victorias fáciles y su disposición a explicar con paciencia la complejidad de las decisiones que debe enfrentar y que debe tomar. Como ejemplo sólo basta leer su discurso de aceptación del doctorado Honoris Causa que recibiera el mes pasado en la Universidad de Notre Dame.

Presidente Funes, esperamos más de Ud. No simplifique la compleja realidad en valoraciones más ideológicas que verdaderas. Si bien no era posible obtener el mejor equipo de gobierno, porque las personas invitadas no aceptaron, porque había que negociar con la fuerza política que lo llevó al poder, porque había que pagar favores políticos, al menos ya no siga diciendo como verdad algo que es incompleto. Comprendemos que los retos son grandes y que nos ha presentado el mejor equipo posible. Esperemos que esté a la altura de lo que se requiere y que tenga éxito para beneficio de todos los salvadoreños.

*Juan A. Valiente es Columnista Salvadoreño, especialista en servicios y tecnología de la información

Newer Post Older Post