Inmigrantes marchan por reforma migratoria ya, Obama pide tiempo

Cientos de inmigrantes, que se manifestaron hoy frente a la Casa Blanca, expresaron su confianza en que el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, cumpla su promesa de una reforma migratoria integral.

Portando pancartas con las leyendas "Reforma, no redadas", "Justicia para los trabajadores" y "Todos somos inmigrantes", los manifestantes reiteraron sus peticiones en el marco de las marchas realizadas en varias ciudades del país en demanda de una reforma migratoria.

Obama "está cumpliendo el calendario que nos dijo", afirmó el director del Centro de Recursos Centroamericanos (CARECEN), Saúl Solórzano, al indicar que el mandatario ha reiterado su compromiso por una reforma migratoria para este año.

La marcha, que reunió a unas 2 mil 500 personas, según los organizadores, se realizó en conmemoración del Día del Trabajo que se celebra a nivel internacional, aunque en Estados Unidos se conmemora en septiembre.

El director de la organización comunitaria Casa de Maryland, Gustavo Torres, señaló que Obama "está comprometido", por lo que confían en que este año saldrá la reforma.

Sobre las nuevas directrices del Departamento de Seguridad Interna, que se enfocan en los empleadores que contratan a indocumentados, Torres señaló que la medida "es menos mala" que las políticas anteriores, pero que lo ideal es una moratoria de las redadas.

Entre los manifestantes estaban los niños de origen mexicano Gerardo, de 12 años, Pablo (11), y Guadalupe Samudio (9), quienes esperan el regreso de su madre, quien fue deportada hace cinco años cuando intentaba reingresar ilegalmente a Estados Unidos.

"Por favor devuelvan a mi mamá porque la queremos y la extrañamos", dijo Pablo. "Yo vivo esto en carne propia y es muy doloroso", aseveró, por su parte, Gerardo.

María Cañas, hondureña de 55 años con más de 20 años en Estados Unidos, pidió la legalización de su estatus migratorio, ya que le han quitado el seguro médico, pese a que sufre problemas de salud tras un accidente de trabajo.

El pastor bautista Edgar Palacios manifestó que "si hay trabajadores que están pagando impuestos y contribuyendo a la riqueza del país, se les debe reconocer sus derechos".

Sobre los opositores a una reforma migratoria que argumentan que eso sería premiar a los indocumentados que violaron la ley, Palacios respondió que muchas violaciones a la ley por parte de Estados Unidos en el pasado originaron que "nuestros hermanos" busquen mejores oportunidades en este país.

Las marchas que se realizaron este viernes en varias ciudades de Estados Unidos en demanda de una reforma migratoria integral, coincidieron con la conmemoración internacional del Día del Trabajo.

Respuesta del Presidente Obama:
La reforma migratoria es un asunto pendiente en EE UU desde el Gobierno de Ronald Reagan (1980-1988). El entonces presidente ofreció una amnistía a los tres millones de sin papeles que residían en el país. Hoy esa cifra ha ascendido hasta casi 12 millones. En sus 100 primeros días en la Casa Blanca, Barack Obama ha lidiado con dos guerras, una grave crisis económica y una alerta de pandemia mundial. El de la inmigración es un asunto que deberá permanecer en la lista de espera, según el propio presidente ha confirmado.

El anuncio suscitó un aluvión de críticas a su derecha y a su izquierda. Los defensores de una reforma que ayude a los inmigrantes ilegales a regularizar su situación, le acusaron de posponer un asunto de máxima urgencia. En el otro extremo, los conservadores le reprocharon dejar intacto un sistema que, según dicen, resta puestos de trabajo a los estadounidenses.

El mandatario matizó: "Creo que habrá progresos en este año, y voy a hacer que esto se ponga en marcha tan rápido como me sea posible". Añadió que el sistema migratorio actual "no es bueno para los trabajadores estadounidenses" y que es "peligroso para los mexicanos que intentan cruzar una peligrosa frontera". Su intención es reformarlo. Obama ha manifestado su voluntad de ofrecer una regularización a los sin papeles que permanecen en el país. Una reforma "comprensiva", según explica Audrey Singer, analista del think tank Brookings Institution. "El presidente quiere un seguimiento policial en la frontera y en los puestos de trabajo y una legalización que evite la drástica medida de deportar a inmigrantes que residen aquí desde hace años", comentó.

SAlvadoreños en El Mundo con notas de Notimex y El Pais

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