Celebran en El Salvador apertura de proceso contra militares en España
Benjamin Cuellar: "es un paso importante para desenmascarar a los militares que se presentan como héroes de la patria, pero que tienen que responder por sanguinarias historias".
Organizaciones de derechos humanos de El Salvador celebraron este martes la decisión de la justicia española de investigar a 14 militares salvadoreños por el asesinato de seis sacerdotes jesuitas, cinco de ellos de origen español, y dos mujeres ocurrido en 1989.
La Audiencia Nacional española se declaró este martes competente para investigar a cuatro generales, dos coroneles, tres tenientes, dos sargentos, un cabo y dos soldados por "asesinatos terroristas" y "delitos contra el derecho de gentes", que protege a los extranjeros internacionalmente amparados por un tratado, indicaron en Madrid fuentes judiciales a la AFP.
"Es un paso muy importante que da la justicia española para terminar con la impunidad en un crimen tan horrendo. Nosotros celebramos que en España se haga la justicia que no se puede hacer en este país", declaró a la AFP el coordinador de la Comisión de Derechos Humanos de El Salvador, Miguel Montenegro.
Para Montenegro, el paso dado por la justicia española "establece un precedente importante" que puede ser seguido por familiares de miles de víctimas que no encuentran justicia en El Salvador.
El ex presidente salvadoreño Alfredo Cristiani (1989-1994), también denunciado por "encubrir" supuestamente el crimen perpetrado por el ejército en el campus de la Universidad Centroamericana (UCA), no será investigado, se precisó en Madrid.
Para el director del Instituto de Derechos Humanos de la UCA, Benjamín Cuéllar, la decisión de la Audiencia Nacional "es un paso importante para desenmascarar a los militares que se presentan como héroes de la patria, pero que tienen que responder por sanguinarias historias".
Cuéllar indico que la UCA no respaldó el proceso abierto en España porque prefería que el caso se ventilara en El Salvador.
La UCA mantiene una demanda por "denegación de justicia" contra el Estado salvadoreño en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, con sede en Washington.
La madrugada del 16 de noviembre de 1989, en el marco de la mayor ofensiva de la guerrilla izquierdista, militares del ahora desaparecido batallón Atlacatl asesinaron a los sacerdotes hispano-salvadoreños Ignacio Ellacuría, rector de la UCA, e Ignacio Martín Baró, vicerrector.
También fueron asesinados los sacerdotes Segundo Montes, Amando López y Juan Ramón Moreno (todos ellos españoles) y Joaquín López (salvadoreño), así como la empleada doméstica Elba Ramos y su hija Celina.
Los militares en un primer momento atribuyeron el crimen a la guerrilla izquierdista.
Tras presión de la comunidad internacional, fueron juzgados en El Salvador nueve militares, entre ellos el director de la Escuela Militar, coronel Guillermo Alfredo Benavides, quien fue culpado de todos los crímenes y condenado a 30 años de cárcel.
Sin embargo, el oficial fue liberado el 1 de abril de 1993, tras promulgarse una ley de amnistía dictada tras el fin de la guerra civil (1980-1992).
La Audiencia Nacional española se declaró este martes competente para investigar a cuatro generales, dos coroneles, tres tenientes, dos sargentos, un cabo y dos soldados por "asesinatos terroristas" y "delitos contra el derecho de gentes", que protege a los extranjeros internacionalmente amparados por un tratado, indicaron en Madrid fuentes judiciales a la AFP.
"Es un paso muy importante que da la justicia española para terminar con la impunidad en un crimen tan horrendo. Nosotros celebramos que en España se haga la justicia que no se puede hacer en este país", declaró a la AFP el coordinador de la Comisión de Derechos Humanos de El Salvador, Miguel Montenegro.
Para Montenegro, el paso dado por la justicia española "establece un precedente importante" que puede ser seguido por familiares de miles de víctimas que no encuentran justicia en El Salvador.
El ex presidente salvadoreño Alfredo Cristiani (1989-1994), también denunciado por "encubrir" supuestamente el crimen perpetrado por el ejército en el campus de la Universidad Centroamericana (UCA), no será investigado, se precisó en Madrid.
Para el director del Instituto de Derechos Humanos de la UCA, Benjamín Cuéllar, la decisión de la Audiencia Nacional "es un paso importante para desenmascarar a los militares que se presentan como héroes de la patria, pero que tienen que responder por sanguinarias historias".
Cuéllar indico que la UCA no respaldó el proceso abierto en España porque prefería que el caso se ventilara en El Salvador.
La UCA mantiene una demanda por "denegación de justicia" contra el Estado salvadoreño en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, con sede en Washington.
La madrugada del 16 de noviembre de 1989, en el marco de la mayor ofensiva de la guerrilla izquierdista, militares del ahora desaparecido batallón Atlacatl asesinaron a los sacerdotes hispano-salvadoreños Ignacio Ellacuría, rector de la UCA, e Ignacio Martín Baró, vicerrector.
También fueron asesinados los sacerdotes Segundo Montes, Amando López y Juan Ramón Moreno (todos ellos españoles) y Joaquín López (salvadoreño), así como la empleada doméstica Elba Ramos y su hija Celina.
Los militares en un primer momento atribuyeron el crimen a la guerrilla izquierdista.
Tras presión de la comunidad internacional, fueron juzgados en El Salvador nueve militares, entre ellos el director de la Escuela Militar, coronel Guillermo Alfredo Benavides, quien fue culpado de todos los crímenes y condenado a 30 años de cárcel.
Sin embargo, el oficial fue liberado el 1 de abril de 1993, tras promulgarse una ley de amnistía dictada tras el fin de la guerra civil (1980-1992).
Publicación AFP 13/1/2009
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Caso Alfredo Cristiani
Ojala que estos famosos heroes de la Patria tan mal llamados sean procesados y castigados por haber cegado el pensamiento y estorbado el crecimiento de ideas y razones justas hacia un pueblo altamente reprimido.
ReplyDeleteDecir Jesuitas en el Exterior es hablar de la caridad evangelica de Jesus reflejada en estos paladines de la fe practica en El Salvador.
Lo ha sido en el exterior y seguira haciendo eco su voz en el pais, como estos profundos pensantes hijos de la caracteriztica vida Jesuita que no se enclaustraron en un monasterio sino su voz y su pensamiento han vertido cimiento de luz y verdad.
Tenga el Justo Dios misericordia sobre sus hijos masacrados para que el sembrio florezca cada vez mas en el Pais.
Un saludo a Benjamin Cuellar quien no descanza hasta ver logrado semejante sueno de un pueblo expectante de la noticia de Justicia.
Saludos,
Jose Matatias Delgado Y Del Hambre.
Hojala y alfin se haga justicia en este caso, y se siga luchando para q pase lo mismo en muchisimos casos mas q han quedado impunes por la inoperancia y encubrimiento de la justicia salvadoreña.
ReplyDeleteFelicitaciones al Benjamin Cuellar q no ha descansado por luchar y denunciar estos casos, ...y hay hobres q luchan toda la vida estos son los imprecindibles... como dice Bertol.
Hojala desenmascaren este y otros casos mas y se lleven a la justicia estos asesinos
ERNESTO