Evaluación a un año de Gobierno del cambio: La oferta de campaña a los Salvadoreños en El Mundo, continua siendo una exclusión del sistema político

Por José Mario Ramírez *

El 21 de mayo del 2009, la diáspora salvadoreña por medio de Salvadoreños en el Mundo-SEEM, finalizaba uno de sus compromisos con el actual gobierno del Presidente Funes, y fue haberle hecho entrega oficial de una propuesta de trabajo de los salvadoreños organizados en Norte América y algunos países de Europa, al señor Juan José García, actual Viceministro para los Salvadoreños en el Exterior. Dicho (VMASE) documento contiene un análisis de la visión, las políticas y estructura de funcionamiento del actual Viceministerio.

En varias oportunidades hablamos con el entonces candidato a la presidencia señor Mauricio Funes sobre esta temática, y en nuestra Sexta Convención realizada en agosto de 2008, en el campus de la Universidad Centroamericana UCA, el entonces candidato hizo público su compromiso, que de llegar a ser Presidente de la República, este tema sería una de sus prioridades, manifestó que no era posible que los compatriotas salvadoreños "sigan siendo excluidos, y vistos como simples remeseros", en esa oportunidad nos invitó a trabajar y hacer propuestas de trabajo.

Tomamos en serio el llamado e iniciamos inmediatamente a elaborar un estudio que nos permitiera, hacer un planteamiento técnico, basado en nuestra propia experiencia de migrantes y no de académicos burócratas de escritorio.

Siempre hemos dicho que nos sentimos orgullosos de ser salvadoreños, nunca le hemos tenido miedo al cambio, por el contario, el exilio, el haber sido forzados a abandonar a nuestros amigos y seres queridos, nos llevo a mantener y hacer crecer nuestros principios y valores.

A un año de gobierno del Presidente Funes, ninguna autoridad de gobierno del cambio nos ha convocado para hablar de los temas estratégicos sobre la migración salvadoreña. ¿Como es posible que se nos excluya en las acciones que este gobierno intenta desarrollar en el exterior y si es el caso en las acciones dentro del país?

Lo que hemos observado es que ni siquiera se nos da audiencia en las oficinas del Viceministerio, vale mencionar que en la administración anterior la Arquitecta Margarita Escobar al menos compartía nuestras inquietudes y nos recibía para hablar de estos temas.

Tengo varias preguntas al señor García y al señor Hato Hasbun, Secretario de Asuntos Estratégicos de la Presidencia:

1.- ¿Cómo se puede hablar de desarrollo económico sin la incorporación del capital humano de la diáspora? Este capital social no es solo los empresarios, estamos hablando en su contexto conceptual: recurso humano calificado, tecnología, ciencia, arte y por supuesto el componente económico, comerciantes, empresarios y remeseros. En un informe de la Secretaria Técnica de este año, presentado en Costa Rica, se expresa la debilidad de los recurso técnicos que el aparato de gobierno tiene, porque no se pensó el la masa de técnicos, profesionales y científicos de la Diáspora? O es que no les interesa? O lo desconocen o simplemente lo excluyen. Estará informado el presidente Funes de este error? No lo sabemos ya que no conocemos el informe de labores del Viceministerio del señor García.

2.- ¿Cuál es la nueva Misión que este Viceministerio tiene? ¿Cuándo fue creada? con quiénes se elaboró tan importante concepto?

Sabemos que la anterior misión no logró su finalidad debido a su proceso de formulación excluyente, dirigida desde el Ministerio de Relaciones Exteriores, que accionó en la práctica bajo intereses exclusivamente económicos, visualizando las remesas familiares como el componente prioritario de su política exterior.

No obstante las acciones diseñadas a fortalecer la vinculación con las comunidades en el exterior, no obtuvo en la práctica resultados exitosos, se dieron reuniones con la diáspora por medio de los foros presidenciales y mesas redondas única y exclusivamente como encuentros sociales y de discusión, es decir no hubieron procesos de seguimiento a concretizar, de igual forma a estas reuniones asistieron invitados políticamente seleccionados, únicamente aquellos afines al Gobierno, en éste tema los resultados son realmente mínimos y sus causas son visibles, las acciones para impulsar la misión no fueron impulsadas adecuadamente, faltó definir los principios que integran los intereses de la diáspora y la de sus familiares radicados en el país, si esto se ha corregido e incorporado en el nuevo gobierno, será factible adecuar acciones que fortalezcan el desarrollo y la relación ciudadanía, diáspora, Gobierno y Estado. Caso contario estamos haciendo mas de los mismo

3.- ¿Cuál es la nueva política del Viceministerio para los Salvadoreños en el exterior? Cuál es la diferencia en relación con la anterior administración?

Sabemos que la anterior política buscaba la inserción en un mundo globalizado. Ya que esta respondía a la política del Ministerio de Relaciones Exteriores,
la política exterior del anterior gobierno trabajó para lograr una proyección y promoción activa de la imagen del país como un espacio económico propicio
y atractivo para la inversión y los negocios; coadyuvar a la atracción de inversiones; promover la oferta exportable salvadoreña y colabora en la negociación de instrumentos y acuerdos que permitan mejorar el posicionamiento competitivo global del país, generar más y mejores oportunidades de acceso en los mercados internacionales y fortalecer la capacidad nacional para atraer inversión extranjera.
En este contexto, la política dirigida a salvadoreños en el exterior, estaba focalizada al tema económico dentro del mundo globalizado y más específicamente de cara a las remesas familiares y al flujo de migrantes que generan una industria altamente productiva.
Como lo hemos dicho en nuestro análisis, las políticas nunca estuvieron orientadas
a favorecer a los migrantes, sino a capitalizar los más de tres mil millones de dólares que ingresan anualmente en concepto de remesas familiares.

El reto que propusimos fue de una nueva política migratoria, la de enfrentar la causa de la migración dentro del país, identificar y buscar las tendencias del capital humano de la diáspora salvadoreña, rediseñar políticas de atención y participación de los y las salvadoreñas en el mundo, para que finalmente los y las migrantes participen desde una concepción de agentes y socios estratégicos en el desarrollo de la Nación y cambiar el rumbo.
A un año del gobierno del cambio, muchos factores estratégicos que son necesarios vincular en una relación con las comunidades de origen, no han sido considerados, éstos tienen efectos inmediatos especialmente en la reducción de la pobreza, mediante la inversión y generación de empleo.

No se ha impulsado una política integral de atención a la familia que reduzca los impactos sobre las migraciones, no fue posible la integración del capital social de la diáspora salvadoreña en el desarrollo del país. ¿Dónde están los cambios señor viceministro?

Debería de poner en practica su tesis de considerar como objetivo
principal la retención, recuperación e integración de nuestros compatriotas; debe de integrarse e institucionalizar una política de migración interna, especialmente dirigida a centroamericanos que están migrando a El Salvador, atenderles eficientemente en sus demandas de servicios, fuentes de empleo y facilitar una ordenada política de ingreso al país.

Por segunda vez le recomendamos

a) Que debe de considerarse la creación de una instancia autónoma financieramente, que fortalezca las condiciones para evitar la migración de nacionales al exterior y la atención a la diáspora existente, las políticas de la nueva instancia gubernamental deben vincular a todas las instancias del Estado, empresa privada, organismos no gubernamentales, cooperación internacional, capital humano de la diáspora y gobiernos locales, seguido de un proceso que a corto plazo integre un marco legal moderno y busque alianzas y acuerdos con la región. Nos referimos al Consejo Nacional de las migraciones

b) Debe de ponderarse en el diseño de las políticas públicas sobre los migrantes, el peso económico de las remesas, en particular la necesidad de fortalecer el proceso ahorro/inversión, base para un crecimiento sostenido y otros valores agregados de carácter económico, el fenómeno de la transnacionalización de las migraciones y su efecto sobre la sociedad y el Estado salvadoreño, el factor estratégico en el apuntalamiento del desarrollo territorial, dado el vínculo con las comunidades de origen y sus efectos inmediatos en la reducción de la pobreza, mediante la inversión y generación de empleo.

Hemos conocido por décadas políticos y funcionarios burócratas mediocres, y a un año del gobierno del cambio, no hemos visto ninguna manifestación, acciones de impacto, ni voluntad política del actual Viceministro para los Salvadoreños en el exterior, no ha trabajado ni incorporado el capital humano de la diáspora al plan de desarrollo que el programa de gobierno del Presidente Funes nos presentó como oferta de campaña.

No percibimos ningún cambio, y de continuar así, seguiremos siendo, los 3 millones de salvadoreños en el mundo, el grupo más grande de patriotas marginados del sistema político y del gobierno salvadoreño.

Creemos en la meritocracia y rechazamos las argollas de amigos y de familiares cercanos a funcionarios, votamos por un cambio, rechazamos el continuismo, somos propositivos y estamos abiertos al debate.

Recomendamos al Viceministro García, rendir un informe a la diáspora salvadoreña, como un acto de transparencia y responsabilidad para quienes enviamos más de tres mil millones de dólares al país, pagamos impuestos y además es un derecho para los que pagamos los salarios de los funcionarios públicos.

*José Mario Ramírez, Salvadoreño y canadiense naturalizado, Miembro de Salvadoreños en el Mundo y Vicepresidente de Asociación Americana de Juristas – AAJ Rama El Salvador

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