Letras de El Salvador

Enviado por Oscar Rolando Hernández

Pues es que un gutute mirichenambre cornoritotingo quera un animalito con nombre científico y que en el monte le dicen zorrillo, por fregar, levantó la pata y ¡tas! echó un chorrito de ge dentina espantis diablis, que regó a cuatro leguas a la cuadra y dijo riéndose con dientitos delgaditos: "¡Valla, para quianden diciendo que la Primavera, que no se qué, que las esencias de la jlores, y el maroma de las llerbas quem balsaman la natura¡ Y tiro tierra para tras con las uñas y siguió caminando contento".

Y era bien bonito el infeliz, con pelitos de blancura, catrincito, que bien hubiera dicho que les saliera aquella chabacanada de tufo. Y un tecolote que ya se estaba desmayando lo vio pasar y se tapó las narices. Y el teco le dijo hablando ñango: "¡A la puerca con las niñas bien vestidas de la jijelife! Que no le da pena. ¡Ufa!". Y todo totoreco salió volando. Y el zorrillo sólo se paró y se rascó un sobaquito y se sonrió con dientes delgaditos y siguió caminando.

Y pasó por un zopiletero que estaba cabeciando y diciendo "¡Que guele, que guele!" "¿Qué les gusta mi olor?, les preguntó. Y un zope bajito hizo así con el dedo gordo y le dijo: "¡Mi olor, mi olor...; que pretencioso el cipotio; ese olor lo tiran los ángeles de la putrufacción para quedar bien con nosotros, ¡llego donde estaba un torogose echadito en su nidito que era bien chiquito y la dijo al zorrillo , "Torogos que te pones el sombrero al contrario, porque en vez den la cabeza te lo pones en el chunchucuyo, ¿soy un ángel de la putrefacción o no? Y el torogos le dijo: "¡Te vua contestar, pero mucho jiede; no sos ángel de nadita¡" "¿Por qué?" le dijo el zorrillo ya bravo. "Porque no tenes tirantes", le dijo el torogos. Pero como había tragado mucho tufo al hablar se desmayó.

Y el zorrillo dijo "¡Buenosta, y ya me voy a verme en un espejo, a ver si es cierto que es verdad"!, y se fue y llegó a un pozo profundis y se inclinó para mirar y ¡allá bien abajo Vio un colon de cielo y en el centro la carita di un animar y dijo; "A ya está un pobre ratón mirando pa´ riva a ver quién lo saca parir a comer, pero no lo saco". Y miró otra vuelta y dijo: "¡Ratón, ratón!" ¿soy ángel o no?" Y como había eco chueco, le contesto: "¡Oh no!"... "¿Por qué?" le gritó el zorrillo tonto: "¿Qué?" le contestó el echo chueco, "¿Qué porque no?" le volvió a preguntar el zorrillo , "!Por qué no¡" le contestó el pozo. Entonces ya jurioso el zorrillo le tiraba unas piegradas y si asomaba y siempre miraba la carita y dijo "Ese animalito no se muere nunca, lo gua chorear" y se sentó al borde y ¡chuy¡ Se miró en el pozo y el pozo no aguantó y dijo con eco chueco: "¡Ufa¡"... y pegó un destornudo macanudo y se pasó llevando al zorrillo que voló por los aires, los vientos y las nubes hasta que pegó en la mera luna llena llena y despertó asustado onde estaba durmiendo y se restregó las pizuñas con las pestañas y dijo: ¡Qué giede por aquí" y sia cabuche.

NOTA del colaborador. Salarrue en sus cuentos, escribía como pronuncian, las personas del campo salvadoreño y por ello, encontrarán palabras que parecerían estar mal escritas. Tomado del libro "CUENTOS DE CIPOTES" 1945. Salarrue.

Newer Post Older Post