Funes pide a Obama trato preferencial para El Salvador porque "la tercera parte de su población vive y trabaja en los Estados Unidos"

Por Mario González

El presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, le pidió a su Secretaria de Estado, Hillary Clinton, analizar y buscar una solución que permita estabilidad migratoria a miles de salvadoreños que residen en la Unión Americana, declaró el presidente electo de El Salvador, Mauricio Funes, al término de una reunión con el mandatario estadounidense.

"El presidente Obama tuvo mucha apertura cuando tanto el presidente Saca como este servidor le planteamos que en el caso de la estabilidad migratoria había que atender particularmente el caso salvadoreño... Él expresó apertura y dijo que le dio instrucciones precisas a la señora Clinton para que atendiera este caso y buscara con la brevedad posible una solución antes de que se venza el TPS para 250 mil salvadoreños", reveló Funes.

Las opciones podrían ir desde la regularización permanente de todos los adscritos al TPS o prórrogas hasta una reforma migratoria integral que los favorezca.

De hecho, Obama abrió la posibilidad de llegar a un arreglo más inmediato con los trabajadores agrícolas, porque en ese rubro los empleadores le han expresado la necesidad que tienen de mano de obra, pero no beneficia mucho a los salvadoreños porque la mayor parte de ellos está en el sector de la agroindustria, de la construcción y los servicios.

"El Presidente Obama puso especial atención al caso salvadoreño porque tanto el presidente Saca como este servidor le insistimos que en el caso de El Salvador, no sólo por la cantidad de deportados, no sólo la cantidad de salvadoreños favorecidos por el TPS, sino por lo que significa para El Salvador que la tercera parte de su población viva y trabaje en los Estados Unidos requiere una atención especial por encima del resto de países centroamericanos", agregó Funes.

Obama fue claro al decir que su prioridad es Haití, pero le ha pedido a su secretaria de Estado que analice la situación y busque una solución favorable tanto para Estados Unidos como para la región centroamericana.

El encuentro entre Obama y los mandatarios salvadoreños se produjo en el marco de la primera reunión con los presidentes del Sistema de Integración Centroamericana (SICA).

Para Funes, lo más importante es la posición de apertura mostrada por el presidente Obama para escuchar lo que la región considera que deben ser las prioridades en las relaciones de Estados Unidos con Centroamérica.

"El presidente Obama adelantó algunas posiciones que permiten adelantar la esperanza de que no sólo habrá un giro en la relación de Centroamérica y Estados Unidos, sino mayor atención a aquellos problemas que nos preocupan más, entre ellos la estabilidad migratoria de los salvadoreños y centroamericanos que viven en Estados Unidos, el cese o por lo menos la regulación de las deportaciones, especialmente de quienes tienen antecedentes criminales", dijo Funes.

La administración estadounidense se muestra anuente también a la recapitalización de la banca multilateral, sobre todo del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y la posibilidad de que pueda dar apoyo, aunque no está obligado, al Banco Centroamericano de Integración Económica, de modo de liberar recursos que puedan destinarse a financiar programas de inversión en infraestructura y de apoyo social.

"En el tema de la capitalización del BID, Obama abrió la posibilidad, el tema se está estudiando pero Estados Unidos quiere que se garantice que los recursos serán utilizados en forma eficiente y que los créditos irán no sólo a los países, sino también a los sectores que más lo necesitan", expresó el presidente electo.

"Es esperanzador porque en ningún momento dijo que no le es posible destinar esos recursos, dada la situación que vive Estados Unidos. Está consciente de canalizar los recursos a través de la banca multilateral, pero tienen que estar seguros de que se utilizarán en forma eficiente", agregó.

Fuente: EDH 20/4/2009

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