Tomás Chévez: "Chévez propuso pedir dinero a Saca para la campaña del PCN"

El partido le notificó que se retirarían de la contienda por escasez de fondos y el candidato propuso ir a pedir plata al Presidente de la República. Resentido con el secretario general pecenista, Tomás Chévez dice que librará una batalla para derrocar al hombre que lleva más de 19 años dirigiendo al PCN. “Vamos a pedirle a las bases que Ciro Zepeda sea sustituido y sacado del partido”
Por Edith Portillo

Tres días después de su expulsión del Partido de Conciliación Nacional, el ex candidato presidencial, Tomás Chévez, sigue en su casa de campaña. Pero ahora, sacado a la fuerza de la campaña electoral, su campaña es otra: sacar por la fuerza a quien durante ya casi 20 años ha ocupado la máxima silla del partido.

Dice que en esta cruzada por derrocar a Ciro Cruz Zepeda tendrá el apoyo de su mentor político, el diputado Orlando Arévalo.

Apurado por la urgencia de preparar con sus abogados los recursos que dice que presentará en las próximas semanas, en esta entrevista -concedida el sábado 7- Tomás Chévez estaba acompañado del ex candidato a vicepresidente, el ex jefe policial Rafael González Garciaguirre, y de la ex candidata a alcaldesa de San Salvador, Mireya Monterrosa.

Chévez revela que todos los acuerdos con el partido fueron de palabra, que nunca se involucró en las decisiones del partido y que en algún momento quisieron imponerle como candidato a la vicepresidencia a un sobrino del dirigente Hernán Contreras. También revela que en sus últimos momentos como candidato, él mismo sugirió un acercamiento con el presidente Antonio Saca para que les financiara la campaña electoral. Por supuesto, el acercamiento que él esperaba no era para lo que ahora sospecha que ya estaba arreglado entre Arena y el PCN al retirar su candidatura. Básicamente estaba tomándo le palabra al mandatario: “Si usted es el presidente y usted quiere conservar el sistema de derecha, y un partido que simpatiza con su ideología no tiene fondos, ¿usted qué haría? Lo que yo hice fue darles una alternativa de solución”.

Usted había dicho que ganaría la presidencial tal como David venció a Goliat. Ni siquiera logró enfrentarse a Goliat.

Yo no creo en el hombre, yo creo en Dios. Yo dije “yo confío en que Dios me va a sacar adelante” y puse el ejemplo ese, porque en la misma Biblia dice que los familiares de David no querían que él se enfrentara porque la llevaba perdida. En esa época, cuando a mí me atacaban que cómo era posible que yo aspirara a llegar a la presidencia con un partido pequeño, con su imagen gastada, con personas consideradas inaceptables en la sociedad, como Ciro Cruz Zepeda y Hernán Contreras, yo decía “vengo confiando en Dios”. Yo sé que Dios me tiene aquí y ha propiciado estas cosas por una sencilla razón: Dios quiere que el pueblo y el mundo entero conozcan la desgracia de la democracia que tenemos aquí.

¿Entonces usted nunca confió en el PCN?

Es que mi confianza siempre fue en el Señor. Yo dije que todo ciudadano que aspire a un cargo público para ayudar al pueblo tiene que subirse a un vehículo político, y el vehículo que me había abierto las puertas era el PCN.

¿Cómo empezó su relación con el PCN?

Yo me acerqué a esta gente porque necesitaba un trámite legal que, aunque tenía derecho a hacerlo, me lo denegaron en la Dirección General de Aduanas. Pedí reconsideración y me lo volvieron a denegar. Ahí me dijeron los asesores legales que les parecía que no iba a avanzar eso ya y que tenía dos alternativas: lo jurídico o lo político. En lo jurídico teníamos que ir a lo contencioso administrativo, y en lo político buscábamos a alguien que nos quisiera ayudar y problema resuelto. Vámonos por lo político, dije. Yo no era amigo de gente política, sino que le hablé a mi hermano en Nueva York. “Hablé con fulano de tal”, me dijo. Hablé con un pastor que estaba engranado con la política y así conocí a Orlando Arévalo, al coronel José Almendáriz y a Roberto Angulo. Ellos fueron los primeros que conocí, empezamos el diálogo, me pidieron información, luego un desayuno en el que se las di, pidieron una audiencia con el ministro de Hacienda. Primero me ofrecieron una diputación y no la acepté porque tengo mi negocio.

¿Por qué cree que se interesaron tanto en ayudarle y ofrecerle rápido una candidatura?

Es que para la audiencia con el ministro yo hice una presentación magistral de qué era lo que me pasaba. Ahí ellos vieron mi capacidad. Luego me dijeron: “Mire, ya no es para diputado, le proponemos la vicepresidencia”. Yo tampoco la acepté, les dije que no me interesaba, que lo que quería era que me ayudaran. Después me invitaron a un almuerzo donde había tres empresarios grandes. Me dijeron que uno de ellos iba entonces para la vicepresidencia y que me querían dar a mí la candidatura presidencial.

¿Quiénes eran los empresarios?

Prefiero no hacerlo, pero eran tres empresarios grandes. Les dije que era algo muy serio, que lo iba a consultar con Dios, con mi familia y con mi pastor.

¿Cómo es que la diputación y la vicepresidencia no le interesaron porque iba a desatender su negocio y la presidencia, que es una responsabilidad mayor, sí le interesó?

Yo, como hombre de fe y de convicciones, siempre he querido ayudar a la gente. Conociendo la realidad del país, uno se embaraza de esa realidad y quiere entonces hacer algo. Conozco del hambre que pasa la gente en el campo, de la gente que muere porque no tiene recursos para comprar sus medicamentos, conozco la corrupción en este país, que es espantosa...

¿La candidatura a la presidencia se la ofrecieron estos tres diputados nada más o ya estaba ahí la cúpula?

Ellos fueron el contacto inicial y luego seguimos negociando. Yo les dije que quería establecer mis condiciones y fueron aceptadas.

¿Cómo? ¿Verbalmente o firmaron algún documento donde quedó establecido?

Verbalmente, porque ya había antes un documento que el PCN firmó comprometiéndose con Unicsal (Unión de Iglesias Cristianas Salvadoreñas) a apoyarlos, aunque tampoco lo hicieron. Yo, como le decía, no creo, y con esto menos que voy a seguir creyendo en los políticos.

Pero veamos, ese documento era con Unicsal. Pero para su candidatura, ¿cómo definieron de qué forma iban a trabajar la campaña, cuál iba a ser su papel en las decisiones partidarias...?

Resto de la entrevista en el Faro.net

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